El caracol en la montaña.

Un día, a mi sobrina y a mí se nos ocurrió ir la montaña. Se lo dijimos a Carmen, a su prima Marina y nos pusimos en marcha hacia el campo. Cuando llegamos, vimos un montón de caracoles. Decidimos cogerlos. Llenamos unas cuantas bolsas, pero antes ya les habíamos cantado:

Caracol col col

saca tus cuernos

y vete al sol.

Pero por mucho que les cantábamos, no salían, parecía que, o estaban dormidos, muertos o habían cambiado de concha...

Cuando llegamos a mi casa, le enseñé la bolsa llena de caracoles a mi madre. Cogió una de las conchas y averiguó que estaban todas vacías.

Al final, ¡ nos quedamos con las ganas de comer caracoles !

Autora: Ángeles Cortés Fernández.

Ficheros autocorrectivos
«El caracol en la montaña»

Aún no estoy GRAMÁTICA

Ya estoy ORTOGRAFÍA